El duelo entre Atlético de Madrid y Real Madrid por los octavos de final de la Champions League tuvo de todo: emociones, penales errados y una decisión arbitral que puso a discutir al mundo futbolero. Los dirigidos por Ancelotti lograron la clasificación en la tanda de penales (4-2) tras un global de 2-2, pero la jugada de la noche fue otra: una mano en el área que los ‘merengues’ reclamaron como penal y que el árbitro decidió no sancionar.
El partido comenzó con un baldado de agua fría para el Real Madrid, pues Conor Gallagher puso en ventaja a los ‘colchoneros’ en el primer minuto de juego. El equipo blanco reaccionó, pero la definición no estuvo de su lado, especialmente cuando Vinícius Júnior falló un penal que pudo cambiar la historia. El brasileño la mandó a las nubes, dejando helados a los hinchas madridistas.
Sin embargo, la jugada que hizo estallar la polémica ocurrió minutos después, cuando Giuliano Simeone tocó el balón con la mano en el área. Para sorpresa de muchos, el árbitro y el VAR consideraron que no era penal, desatando la furia de los jugadores blancos y de su técnico, Carlo Ancelotti. “No lo entiendo, pero hay que respetar la decisión”, dijo el italiano con resignación.
El partido se fue a la definición desde los doce pasos, donde el Real Madrid mostró su jerarquía y se llevó el triunfo. Eso sí, otro hecho inusual ocurrió en la tanda: Julián Álvarez, delantero del Atlético, ejecutó un penal que fue anulado porque el VAR determinó que tocó el balón con ambos pies.
Con esta victoria, el Madrid avanza a cuartos de final, pero deja en el aire un debate que dará de qué hablar. ¿Era penal la mano en el área? ¿El VAR acertó con la decisión sobre Julián Álvarez? Lo cierto es que la Champions sigue demostrando que, además de fútbol, también está llena de controversia.
